Torres de defensa anticorsaria
La comarca de la Marina baixa, cuya capital histórica es La Vila Joiosa, siempre ha vivido de cara al mar. Entre algunos motivos que la han llevado a estar siempre abierta hacia el Mediterráneo, ha sido el gran arco de montañas que la rodea y que dificultaba la comunicación terrestre., puesto que la mayoría de los pasos no eran adecuados para los carros de transporte de mercaderías.
Pero el mar no sólo era la ‘autopista’ comercial de la comarca sino también era el escenario de constantes ataques de los piratas berberiscos. Ante el aumento de las incursiones piratas las ciudades se veían obligadas a planificar su defensa y para ello se consideró la construcción de todo un sistema defensivo de costa.
A finales del siglo XV, y especialmente en el siglo XVI, bajo el reinado de Felipe II, se construye todo un sistema de torres de defensa para divisar al enemigo antes que desembarcase para secuestrar a gente, para pedir rescate o venderla como esclavos al regresar a su tierra. El distrito de defensa de La Vila Joiosa, que abarcaba toda la Marina Baixa, contaba con cuatro castillos y 5 torres vigía. En caso de avistar naves berberiscas se transmitía a través de señales de humo y fuego a las torres de huerta, en el interior del municipio. Todo el sistema de defensa se coordinaba desde el el castillo de La Vila Joiosa, convertido ahora en un parque donde hay diferentes paneles explicativos. De aquellas torres defensivas en La Vila Joiosa se conservan dos: la Torre de l’Aguiló y la Torre del Xarco.
Construida en 1530 es la más antigua que se conserva en la zona. Está ubicada en el extremo norte del término municipal, en la Cala de La Vila. Es una torre de planta cuadrada de cuatro metros de lado por 8 de altura. Según se explica en el panel informativo del lugar: “La torre tenía tres soldados que cada mañana inspeccionaban las calas vecinas y contaban con un morterete de gran alcance para dificultar los desembarcos en La Vila Joiosa y Benidorm. Para avisar del peligro se hacía una fogata con mucho humo en la terraza”
Desde la torre hay unas visitas excepcionales a toda la bahía de la comarca, por lo que desde allí se controlaban incluso las señales que llegaban desde otros requerimientos como Calpe, San Juan o Alicante.
El acceso a la torre es una ruta muy agradable de poco más de un kilómetro y de una hora aproximada de duración. Desde la Cala de La Vila hay un acceso habilitado para que de manera cómoda se pueda acceder a ella, y no sólo disfrutar de unas increíbles vistas, sino también de aves marinas, de la flora típica de nuestras montañas como el pino blanco o carrasco, y si tenemos un día de suerte incluso podremos divisar delfines en alta mar.
También se puede acceder a la Torre de l’Aguiló por la Colada de la Costa, una ruta de aproximadamente 8 kilómetros desde la Playa del Torres que transcurre entre acantilados y con unas espectaculares vistas al Mediterráneo.
Es la torre de defensa más al sur del distrito de La Vila Joiosa. La torre es de planta circular de siete metros de diámetro, de cuerpo cilíndrico y 12 metros de altura. Está situada en un saliente de costa a unos 31 metros de altura sobre nivel del mar en la parte sur de la cala del Xarco. Desde ella se puede divisar el cabo de Santa Pola, hacia el sur, y hacia el norte Benidorm.
Desde La Vila Joiosa también hay una ruta de dificultad media-baja para disfrutar de un paseo entre acantilados, bordeando el Mediterráneo hasta llegar a la cala del Xarco. La Torre es de titularidad privada por lo que para acceder a ella hay que pedir permiso a los propietarios.