Virgen del Carmen
Hay banderitas de papel de proa a popa en las embarcaciones pesqueras y de recreo. Las sirenas y cláxones tienen un timbre diferente. A bordo niños y niñas, mujeres y hombres mayores, jóvenes… con cara risueña y ambiente festivo. No es un día de faena en el puerto de La Vila, es el día de la Virgen del Carmen.
La Vila Joiosa siempre ha estado, y está, ligada a la mar. La industria pesquera es una de las actividades económicas tradicionales más importante en esta ciudad de la Costa Blanca. Además de la pesca hay otras actividades de dinamización de la economía local que la unen más al Mediterráneo: deportes náuticos, barcos de recreo…
Esa comunión de La Vila Joiosa y la mar hace que el 16 de Julio, festividad de la Virgen del Carmen, patrona de la mar, de los pescadores y marineros, sea un día entrañable y especial para este pueblo costero. Prácticamente todas las familias han tenido y tienen relación con la mar a través de amigos y/o familiares, por lo que es un día más que señalado en el calendario vilero, a pesar de no ser festividad local.
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La tarde del 16 de Julio la imagen de la Virgen del Carmen baja en romería hasta el puerto para iniciar la Procesión Marinera por la bahía de La Vila Joiosa. La imagen de la patrona del mar navega en una barca de pesca mientras que decenas de embarcaciones grandes y pequeñas, de pesca y de recreo, engalanadas para la ocasión, la acompañan haciendo sonar sus sirenas.
Una instantánea que desprende agradecimiento, devoción y alegría, y que a muchos les hace olvidar, aunque sea por un momento, la dureza de los golpes de mar.
Como reza en la bajada peatonal que hay frente al Club Náutico, que está tematizada y dedicada a los pescadores vileros. “Hay tres clases de hombres: los vivos, los muertos y los que van por la mar”
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