Esta cala de cantos rodados y arenas está ubicada a 3 kilómetros del centro urbano dirección Benidorm. Con una longitud de 160 metros una lengua de roca la divide en dos. Es una de las calas con mayor tradición nudista de la Marina Baixa, tradición que se remonta a los años setenta del pasado siglo. Aunque en los últimos años ha habido un aumento de textil desde el ayuntamiento vilero se aconseja el uso de la desnudez.

El acceso rodado al Racó del Conill es difícil pero merece la pena. Además es una cala perfecta para el buceo, de hecho ofrece una increíble ruta snorkel para disfrutar de sus execelentes aguas turquesas y sus riquísimos fondos marinos.